Durante una entrevista con LA NACION, el expresidente reconoció que fue un error su última candidatura en las polémicas elecciones de octubre
Evo Morales llegó a la entrevista con varios recortes periodÃsticos bajo el brazo. Todos se referÃan a las advertencias norteamericanas a paÃses y gobiernos que colaboren con el expresidente que en 2008 expulsó de Bolivia al embajador norteamericano. "Estados Unidos me tiene en la mira, y yo me acuerdo perfectamente de lo que pasó en Libia y en Irak. Esa es una de las razones por las que pensé en ser candidato a legislador [en las elecciones del 3 de mayo] para blindarme frente a esas amenazas", dijo a LA NACION, en Buenos Aires.
A un mes y medio de su llegada a Buenos Aires, Evo ya convirtió la sede sindical de los docentes del barrio de San Telmo en su despacho porteño. Allà llega en las primeras horas de la mañana y se va a la noche. Se lo ve mucho más relajado y sonriente que en los 13 años que tuvo un liderazgo absoluto que le permitió torcer el rumbo de uno de los paÃses más pobres de la región para convertirlo en una economÃa en constante crecimiento y reducir a la mitad los niveles de pobreza.
Ejercicio fÃsico y aprender a cocinar, lavar y planchar: la rutina de Evo Morales en la Argentina
Evo ya hace planes sobre cómo va a ser su futuro polÃtico durante un eventual gobierno de Luis Arce, su exministro de EconomÃa, que encabezará la fórmula del Movimiento al Socialismo (MAS) junto al excanciller David Choquehuanca, y por ahora lideran las encuestas preelectorales del próximo 3 de mayo con algo más del 25% de las preferencias. "Quiero colaborar con mi experiencia de cinco años como diputado para mantener unida a la bancada del MAS", dijo.
-En 2014 usted decÃa que soñaba con poder retirarse de la vida polÃtica y abrir un restaurante en su región del Chapare. Pero, en cambio, decidió volver a presentarse el año pasado como candidato presidencial, pese a que hubo un referéndum en contra... y todo terminó mal. ¿Por qué es tan difÃcil dejar el poder?
-Yo no acepté la cuarta elección porque quise. Mi proyecto era terminar mi mandato este 22 de enero y volverme al Chapare. Entonces, después de que ganó el no en el referéndum de 2016, pese a que fue un triunfo basado en mentiras, me dije: 'Si el pueblo no me quiere, me vuelvo al Chapare'. Pero luego surgió un pedido de las bases, los movimientos sociales y los asambleÃstas, y exploramos la vÃa legal para la reelección. De todas maneras, reconozco que fue un error. DeberÃa haber rechazado ese reclamo.
-¿Y cómo ve ahora la marcha de este proceso electoral para las elecciones de mayo?
-El gran temor que tenemos es que haya fraude, o incluso un nuevo golpe. Después de tanta inversión y tantos muertos, no creo que la derecha haya arriesgado tanto para quedarse solo ocho meses en la presidencia. Yo siempre digo que el neoliberalismo puede volver por traición, por división o por ambición. Y es mi obligación hacer reflexionar a todos para que de ninguna manera vuelva el neoliberalismo. Por eso tenemos que garantizar la transparencia de todo el proceso electoral y estamos trabajando con la comunidad internacional para que haya veedores. Además, en el frente interno estamos evaluando en el MAS cómo fiscalizar mejor todo el proceso electoral. No necesitamos ayuda, pero tampoco que nos quiten votos. Queremos que digan la verdad. Es una lucha de clases.