Los asambleÃstas del partido gobernante y los fiscales coincidieron en que el extinto viceministro Rodolfo Illanes en su calidad de secuestrado ordenó el repliegue de la PolicÃa, para salvar su vida, pero que el comandante de La Paz, José Aranibar no obedeció sus órdenes.
“La condición de secuestrado no le quita, no le inhibe la calidad de viceministro, y jerárquicamente el viceministro es superior a un comandante departamental (Â…). Si se detecta indicios de que habÃa una orden de replegarse y no lo hicieron, seguro asumirán las responsabilidades”, declaró el asambleÃsta del MAS, VÃctor Borda .
Explicó que el comandante de La Paz debiera obedecer al viceministro Illanes, más aún si estaba en el lugar del conflicto, no obstante su situación era de una persona tomada como rehén por los mineros cooperativistas, el pasado 25 de agosto, cuando fue asesinado.
¿Qué ordenes debió acatar el jefe policial, del ministro o del viceministro? Borda dijo: “(Debió obedecer) al viceministro, excepto que haya existido una contraorden del ministro (Carlos Romero)”.